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¿A quién no le gusta una escapada a la playa en verano? Sol, brisa marina, descanso… Sin embargo, hay un detalle que muchos pasan por alto y que puede jugarte una mala pasada: ¿sabías que la arena puede estropear la pintura del coche? Puede parecer algo insignificante, pero esos diminutos granos que se cuelan por todas partes tienen más peligro del que imaginas. En este artículo te vamos a contar cómo afecta la arena de la playa a la carrocería, por qué puede dañar la pintura del coche, qué errores conviene evitar y qué trucos te ayudarán a mantenerlo en perfecto estado durante todo el verano. ¿Preparado para proteger tu coche este verano? ¡Sigue leyendo!
¿Es la arena de la playa un enemigo de la pintura del coche?
¿Alguna vez has notado el coche lleno de microarañazos después de unas vacaciones cerca del mar? Pues no es casualidad. La arena de la playa es muchísimo más agresiva de lo que parece a simple vista. ¿Sabes por qué? Porque está formada por granos diminutos de cuarzo, sílice y otros minerales que tienen una dureza considerable. Eso significa que cuando se depositan sobre la superficie del vehículo, funcionan como si fueran una lija microscópica.
De este modo, el simple hecho de pasar un trapo seco sobre la carrocería llena de arena puede provocar esos daños. Bajo el sol, los arañazos se ven aún más, y la pintura llega a perder ese brillo característico que tanto nos gusta en los vehículos.
Desgraciadamente, la cosa no acaba ahí. A la arena hay que sumarle el salitre marino, que se adhiere a la carrocería y acelera la corrosión. Por eso, si no lo limpias a tiempo, puede afectar incluso a zonas metálicas o a los bajos del vehículo. Así que ya sabes que, si no tomas precauciones, la playa puede ser fatídica para la pintura de tu coche.
¿Cómo evitar o paliar los efectos de la arena en la carrocería?
Ahora que ya sabes que la unión de arena de la playa y carrocería no es buena, es el momento de poner remedio. Con estos trucos mantendrás tu vehículo protegido y la pintura como nueva.
Lava el coche tras cada visita a la playa
Parece obvio, pero mucha gente lo deja pasar. Cuando vuelvas de la costa, lo primero que debes hacer es lavar el coche con abundante agua, preferiblemente con manguera a presión. Así eliminarás los residuos sin frotar, que es lo que realmente causa los arañazos. Te recomendamos que evites los túneles de lavado con cepillos agresivos.
Además, en el caso de que vivas en zona costera, es importante que limpies el vehículo con frecuencia, pues la arena y el salitre se acumulan sin que te des cuenta. ¡Recuerda limpiar también las zonas bajas del coche!
Nunca limpies la pintura con un trapo seco
Aunque tengas prisa o creas que tu coche tiene poca arena, no lo limpies nunca frotando en seco, ya que es una de las formas más rápidas de rayar la carrocería. Si necesitas quitar arena en un momento puntual, el mejor truco es usar agua, aunque sea de botella. ¡Cualquier cosa menos arrastrar el polvo de la playa sobre la pintura!
Usa ceras o protectores antes del verano
Antes de que empiece la temporada de playa, aplica una cera protectora. Este producto actúa como una barrera entre la pintura y los elementos externos, reduciendo el riesgo de arañazos y facilitando la limpieza.
Aparca con cabeza
Si puedes, evita aparcar justo al lado del mar. La brisa marina está cargada de sal, y la arena puede volar con el viento. Lo ideal es que busques una zona cubierta o uses una funda transpirable para aumentar la protección. A su vez, también puedes colocar parasoles para evitar que entre arena por las rendijas, además de cubrir la función principal de resguardar el interior del vehículo del sol.
No circules por caminos con mucha arena
Antes te hemos dicho que no aparques al lado del mar, pero todavía es más peligroso meter el coche en la propia arena. Aunque tu vehículo tenga tracción y puedas salir sin problemas, los granos de la playa se pueden colar en todas partes, desde frenos y ruedas hasta bajos y juntas. Esto puede causar varios problemas. Por ejemplo, si los granos se cuelan en el sistema de frenado, especialmente si lleva discos ventilados, pueden generar ruidos, desgaste prematuro e incluso una ligera pérdida de eficacia en la frenada.
Otros enemigos estivales de la pintura de tu automóvil
La arena de la playa no es el único enemigo para el coche, puesto que hay otros factores que también pueden poner en apuros a la pintura del coche durante el verano.
Rayos UV
El sol directo es un enemigo silencioso, y los rayos UV pueden desgastar y decolorar la pintura, sobre todo si es de colores oscuros o metalizados. A su vez, puede provocar que las manchas de sal o polvo queden marcadas si no se limpian a tiempo.
Salitre marino
Ya lo hemos mencionado, pero conviene insistir. El salitre es altamente corrosivo y se acumula en zonas metálicas, juntas y bajo el coche, donde a menudo no lo vemos… hasta que es tarde. Si visitas mucho la playa, te aconsejamos que limpies el coche de arriba a abajo con frecuencia.
Excrementos de aves, insectos y polen
Aunque no lo parezca, los excrementos de pájaros y los restos de insectos son ácidos y pueden dañar el acabado del coche si no se eliminan pronto. Lo mismo ocurre con el polen, que en grandes cantidades se puede adherir creando una capa pegajosa difícil de eliminar de la pintura.
Protector solar y cremas
Este enemigo es más habitual de lo que parece. El protector solar, junto con otras cremas y lociones, contiene componentes químicos que reaccionan con el barniz del coche. ¿El resultado? Manchas blanquecinas o zonas opacas que son muy difíciles de pulir si no se limpian rápido. Basta con que alguien apoye un brazo que tenga protector solar o deje una bolsa sobre el capó tras echarse crema para que el daño esté hecho.
Resina y savia de los árboles
Aparcar bajo un árbol en verano parece buena idea… hasta que vuelves y descubres la carrocería llena de gotas pegajosas. Algunas especies liberan savia o resina que, combinadas con el calor, se funden con la pintura y dejan manchas imposibles. Además, suelen atraer insectos, así que el combo es doble.
¿Cómo cuidar la pintura de tu coche en verano? Consejos prácticos
Ahora que ya sabes lo que puede dañar a tu coche, es el momento de hablar de cómo cuidar la pintura de tu coche en verano sin complicarte la vida.
Lava el coche con regularidad
Si vives en zona de playa o haces viajes frecuentes a la playa, es recomendable que laves tu coche al menos una vez por semana. Para ello, debes usar productos específicos para carrocería, agua tibia y secado con toalla de microfibra. ¡Nada de esponjas abrasivas o cepillos duros!
Encerar dos veces al año (como mínimo)
La mejor época para encerar el vehículo es hacerlo justo antes del verano y después, para preparar y restaurar la pintura. La cera crea una película protectora que repele agua, arena y suciedad, y lo mejor: ¡hace que tu coche brille como recién salido del concesionario!
Apuesta por recubrimientos cerámicos
Antes hablamos de la cera protectora, pero si quieres un paso más allá, debes saber que existen recubrimientos cerámicos o de titanio que ofrecen protección durante meses. Son más caros, sí, pero su durabilidad y resistencia al salitre, rayos UV y microarañazos lo compensan.
Revisa las zonas bajas y ruedas tras cada escapada
Los bajos del coche acumulan mucha más arena de la que crees, y si no la retiras, se pueden acabar oxidando ciertas partes del vehículo. ¡Recuerda lavar esta parte también usando, a ser posible, una manguera a presión!
Usa guantes de microfibra en lugar de esponjas tradicionales
Cuando laves tu coche, evita las esponjas clásicas, ya que tienden a arrastrar suciedad y partículas que pueden rayar la pintura. En su lugar, opta por guantes o manoplas de microfibra, que atrapan mejor la suciedad y son mucho más suaves con la superficie del vehículo. Además, se adaptan mejor a las formas y rincones del coche.
Nada de lavarlo al sol directo
Aunque no lo parezca, lavar el coche a pleno sol puede ser un error. El calor hace que el jabón y el agua se sequen demasiado rápido, dejando marcas, restos de cal y manchas en la pintura. Lo ideal es hacerlo a primera hora de la mañana o al atardecer, en sombra, y siempre secar con una toalla de microfibra limpia.
En resumen, el verano es para disfrutarlo, no para lamentarse porque hemos ido a la playa con nuestro coche y viene lleno de arañazos y manchas. Esperamos que pongas en marcha nuestros consejos para que mantengas una carrocería como nueva, tanto si vives cerca como lejos del mar. En caso de que quieras cambiar de coche, en Clicars te lo ponemos fácil. Todos nuestros vehículos reacondicionados pasan controles exhaustivos, incluida la revisión estética y de pintura, para que solo tengas que preocuparte de una cosa: conducir y disfrutar. ¡Entra en nuestra web ahora!