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Si estás leyendo este artículo, seguramente tengamos que darte la enhorabuena. Bien porque acabas de tener un niño, te planteas ampliar la familia o simplemente estás haciendo con antelación los deberes propios del instinto paternal o maternal. En cualquier, caso, enhorabuena, porque vamos a darte una serie de consejos para escoger la mejor silla para tu coche nuevo o de ocasión. Una compra importante para la seguridad de los niños que debe ser siempre meditada.

También te ayudaremos a instalarla correctamente, ya que tan malo es comprar una silla sin homologar como que ésta no se adapte a los más pequeños de la casa. El mal uso de las sillitas infantiles multiplica el riesgo de muerte en accidentes de tráfico. Según la DGT, son una de las principales causas de muerte entre los menores de 14 años y el 40% de los niños fallecidos no utiliza ningún sistema de protección.

Siempre una silla para homologada para viajes seguros

Lo primero que debemos tener en cuenta en la silla para niños es su homologación. Aunque parezca mentira, todavía se siguen vendiendo Sistemas de Retención Infantil (SRI) que no cumplen con los estándares mínimos. En España se comercializan sillas infantiles homologadas según varias normativas, pero te recomendamos que sigas la ECE R129 i-Size, más reciente y en vigor desde 2013.

Siempre que sea posible, ya que las sillas que siguen esta normativa requieren que los coches tengan el sistema ISOFIX, que permite un mejor agarre del SRI y con el que se garantiza que los niños viajen con seguridad hasta los 15 meses a contramarcha, el método más seguro y obligatorio hasta esa edad. Además, las sillitas i-Size son mucho más fáciles de instalar gracias al citado sistema ISOFIX, gracias a unos enganches que encajan rápidamente con los anclajes de los asientos. Para saber si tu coche nuevo o de segunda mano es compatible con la silla que quieres, puedes utilizar los comparadores de organismos como el RACE.

La mejor silla para el coche es la que se adapta mejor al niño

Más allá de la marca o del fabricante, es importante que la silla se adapte a cada fase de crecimiento del niño. En el caso de la homologación i-Size tendrás que tener en cuenta la altura mientras que si optas por una silla con la homologación ECE R44/04, también vigente -pero desde 2004-, tu criterio será el peso.

En este segundo caso encontrarás las sillas del Grupo 0 (entre 0 y 10 kilos), que son de tipo capazo; las del Grupo 0+ (entre 0 y 13 kilos), para ir a contramarcha; las del Grupo I (entre 9 y 18 kilos), versátiles en ambos sentidos y que se pueden instalar con Isofix o cinturón de seguridad; las del Grupo II (entre 15 y 25 kilos), con respaldo y cinturón de seguridad; y finalmente las del Grupo III (entre 22 y 36 kilos), que son cojines alzadores y el último paso antes de usar el cinturón de seguridad como los adultos.

Lo ideal es que vayas cubriendo con el mayor número de modelos posibles los diferentes pasos del crecimiento, pero sabemos que nadie tiene presupuesto para afrontar tantos cambios. Por eso hay fabricantes de sillas infantiles que tienen sillas que combinan varios grupos y que, por tanto, se adaptan a varias fases. Eso sí, cuanto más abarquen menos efectivas serán. No recomendamos, bajo ningún concepto, usar recursos como cojines sin homologar para aprovechar sillas de otros niños más mayores. Corremos el riesgo de deslizamientos u holguras que serían muy peligrosas en caso de accidente.

Si vas a comprar una silla para el coche con homologación i-Size tendrás en cuenta la estatura del niño. Con esta magnitud, la recomendación es que vaya a contramarcha hasta los 105 centímetros (o 4 años). Como ya te hemos contado, la instalación de estas sillas es mucho más fácil gracias a sus tres puntos de anclaje. La siguiente categoría i-Size es para aquellos niños más grandes de entre 100 y 150 centímetros, que viajarán en sillas con ISOFIX o con cinturón de seguridad. Se instalan ya en el sentido de la marcha y llevan un respaldo obligatorio.

la mejor silla infantil

¿Cuál es la sillita para el coche más segura?

Como hemos comentado, la seguridad es un factor que dependerá en gran medida de la elección adecuada en forma y tamaño para el niño, pero también es cierto que hay marcas que tienen mejor reputación. Nunca recurras a rankings que no proceden de fuentes oficiales. El más completo y con mayor tradición es el que elabora el RACE junto a otras 30 instituciones europeas que someten anualmente a cientos de sillas a un test de impacto.

En esta clasificación encontrarás las sillas más seguras por tamaños atendiendo a su facilidad de uso, ergonomía o si tienen sustancias perjudiciales. Los SRI que mejor nota han sacado en estas pruebas son de fabricantes como Bébé Confort, Kiddy, Silver Cross, Peg Perego o Cybex. Algunos de sus modelos han conseguido la calificación máxima de cinco estrellas.

Consejos para un uso óptimo de las sillitas infantiles

Finalmente, aquí van una serie de consejos generales para que la experiencia de viajar con niños sea lo más óptima posible. La DGT recuerda que la velocidad máxima a la que un adulto es capaz de impedir que un niño salga lanzado hacia delante en caso de impacto es solo de 5 km/h, de ahí nunca debe llevarse a un pequeño en brazos ni suelto. Y menos, compartir cinturón, ya que podría ser aplastado.

La sillita debe estar en los asientos traseros a no ser que, excepcionalmente, se desconecte el airbag del asiento del copiloto. Además de las recomendaciones ya citadas sobre los viajes a contramarcha, hay que tener cuidado con no retorcer ni doblar los arneses o el cinturón. En cuanto a la colocación de la cabeza del niño, ésta no debe asomar por encima del respaldo del sistema de retención.

Los mayores de 4 años han de usar cojines con respaldo que reducen la gravedad de lesiones en la cabeza por colisiones laterales. Se aconseja la utilización del capazo cuando es necesario llevar al recién nacido acostado por razones médicas y así ha sido prescrito por el pediatra. Y por último, pero no menos importante, si la sillita ha recibido algún impacto por una colisión o accidente, nunca se debe reutilizar.

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